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Germinados y sus beneficios para la salud

Desde hace miles de años los asiáticos recomendaban el consumo de brotes para lograr vivir más de 100 años. Y no se trataba de vivir muchos años sino de hacerlo con calidad y libre de enfermedades. Los brotes aportan al organismo, además de las enzimas (diastasas) que se activan en el momento del desarrollo de la nueva plántula, parte de la energía vital intrínseca al nuevo organismo vivo. 

Cuando un grano de cualquier cereal o leguminosa cuenta con el agua, oxígeno y calor suficientes germina. Una vez germinados son más nutritivos y fáciles de digerir. Los granos de cereales y leguminosas son alimentos “concentrados” y, debido a su bajo contenido en agua y su riqueza en hidratos de carbono complejos -como el almidón- y proteínas, no deben consumirse crudos. Para que al organismo le resulte más fácil su asimilación se comen cocidos o asados. Con ello, se realiza una especie de “pre-digestión” que nuestro organismo no podría realizar por sí sólo. Los germinados, en cambio, es como si ya hubieran alcanzado ese estado. 

Dentro de sus beneficios
Ricos en vitaminas y minerales esenciales para nuestra salud. 
Son digeridos y asimilados fácilmente por el organismo, según nuestro biotipo sanguíneo. 
Son fáciles de hacer. 

Informe nutricional 
Aminoácidos esenciales. Los germinados, especialmente de legumbres, proporcionan al organismo proteínas completas que se transforman en los ocho aminoácidos esenciales. La falta de uno sólo de estos compuestos puede favorecer la aparición de alergias, debilidad, mala digestión, deficiencias en la inmunidad o envejecimiento prematuro de las células. 

Vitamina C. Una de las sustancias que más aumenta por efecto de la germinación. Los brotes de trigo, lentejas, soja, garbanzos y judías son excelentes fuentes de esta vitamina, por ejemplo la soja germinada incrementa su contenido en vitamina C hasta un 100% y los brotes de trigo en un 600% en sólo 5 días. 

Beta carotenos (pro-vitamina A). El germinado de alfalfa, por ejemplo, contiene más beta carotenos que el tomate o el pimiento verde y muchas frutas. Los germinados de col y de guisantes también son excelentes fuentes de esta vitamina esencial para el crecimiento, el desarrollo, la buena vista y el aparato reproductor. 

Vitamina B. La tiamina (B1), la riboflavina (B2) y la niacina (B3) son abundantes en los germinados de alfalfa, trigo, girasol, centeno y sésamo. Contribuyen al buen funcionamiento del sistema nervioso. 

Vitamina E. Esta vitamina actúa como antioxidante celular, es un excelente protector del corazón y un buen tonificante. El trigo germinado llega a incrementar hasta tres veces su contenido. 

Vitamina K. Posee propiedades coagulantes, se encuentra en la alfalfa germinada. 

Clorofila. Las semillas germinadas que más clorofila sintetizan son las de trigo y las de alfalfa. La clorofila es absorbida directamente por la sangre a través del sistema linfático, en el torrente sanguíneo activa el metabolismo celular, mejora la defensa, resistencia, capacidad regeneradora de las células, y la respiración, entre otras propiedades, potencia los procesos naturales de curación, depura la sangre, frena las infecciones y equilibra la relación ácido-base en el organismo. 

Calcio. Los germinados de sésamo proporcionan abundante calcio, también son excelentes fuentes de este mineral los brotes de almendra, girasol, alfalfa y garbanzo. 

Potasio. Se encuentra en los brotes de almendras, sésamo, girasol, soja y judías. 

Hierro. Contienen en cantidades importantes los brotes de alfalfa, fenogreco, lentejas, soja roja y soja verde 

Oligoelementos. Los germinados contienen oligoelementos como el yodo, el zinc, el selenio, el silicio, el cromo y el cobalto. 

Enzimas. Cuando se comen crudas las enzimas de las semillas germinadas -llamadas diastasas- facilitan la digestión de la fibra, las proteínas y las grasas. 

Digestivos, nutritivos y de bajas calorías. Aportan muy pocas calorías, por ejemplo 100 grs. de brotes de soja: 30 calorías. 

 Información nutricional de los germinados más consumidos 

Cualquier semilla de leguminosa o grano de cereal puede ser germinado, aunque, los más apreciados por su ternura y buen sabor son los brotes de: legumbres (porotos mung, soja, alfalfa), cereales (trigo, cebada) y también de berro, rábano, calabaza, girasol, lino, sésamo, etc. El sabor es variable, por ejemplo el de alfalfa es muy agradable, el de mostaza es el más picante y el de trigo tiene sabor dulce por los carbohidratos que contiene 

•Alfalfa: completo y más consumido por su agradable sabor. Contiene vitaminas A, B, C, E y K , calcio, magnesio, potasio, hierro, selenio y zinc y los aminoácidos más importantes. Es remineralizante, combate la fatiga y la debilidad. 
Arroz integral: es rico en vitamina B, fósforo, potasio, magnesio, sodio, calcio y silicio. Ayuda a la adecuada conservación de huesos y dientes. 
Arvejas: proporcionan clorofila, proteínas, carbohidratos, fibra, vitamina A, hierro, potasio y magnesio. 
Avena: la semilla germinada más recomendable para trastornos nerviosos, depresiones y alteraciones del sueño. Contiene vitaminas B y E, proteínas, carbohidratos, fibra , minerales y un alto contenido en silicio, necesario para el desarrollo de las estructuras musculares, cerebrales y nerviosas. 
Berro: muy adecuado para combatir los síntomas de la fatiga primaveral. Alcaliniza y depura la sangre, neutraliza el exceso de toxinas. Regula el metabolismo. Es rico en hierro, fósforo, manganeso, cobre, zinc, yodo, calcio y vitaminas A, B2, E y C. 
Fenogreco: limpiador sanguíneo y renal, se recomienda para levantar el ánimo decaído y para reforzar el organismo. Estimula las funciones digestivas y hepáticas. Otorga un agradable olor al sudor de quienes lo consumen. Contiene abundante fósforo y hierro. 
Garbanzos: son ricos en carbohidratos, fibra, calcio, proteínas, magnesio, potasio y vitaminas A y C. No producen gases durante la digestión 
Lentejas: retrasan el envejecimiento y son ricas en proteínas, vitamina C y hierro. 
Maíz: alto contenido en magnesio, necesario para conservar la tensión muscular especialmente en el tracto intestinal. 
Mostaza: adecuado para tratar trastornos digestivos como gastritis, enteritis, etc. Rica en vitamina C, proteínas y lípidos. 
Frijoles chino o Porotos Mung: son ricos en vitaminas A, C, y complejo B. 
Semillas de calabaza: contienen proteínas, vitamina E, fósforo, hierro y zinc. 
Semillas de girasol: ricas en proteínas, grasas insaturadas, vitaminas B y E, calcio, hierro, fósforo, potasio y magnesio. 
Rabanito: contiene abundante clorofila, útil para combatir digestiones pesadas y para calmar la tos. 
Sésamo: buena fuente de fibra, proteínas, vitaminas B y E, magnesio, potasio, hierro, fósforo y calcio. 
Soja verde: contiene proteínas que dan lugar al aminoácido metionina, de efecto relajante. Fortalece el sistema nervioso y contribuye a rebajar el exceso de colesterol. Son ricas en vitaminas A, C, hierro y potasio. 
Trigo: es rico en proteínas, magnesio, fósforo y vitaminas B y E. Previene infecciones, remineraliza, regenera las células y sirve para tratar trastornos nerviosos. 

Propiedades 
Los germinados ayudan a prevenir enfermedades o a tratarlas en el caso de que ya se hayan manifestado. Se destacan las siguientes propiedades: 

• Favorecen los procesos de desintoxicación, depuración y eliminación de residuos almacenados en los tejidos o en la sangre. 
• Fortalecen el sistema inmune. 
• Antioxidantes, combaten la acción de los radicales libres. 
• Estimulan las secreciones del páncreas. 
• Facilitan la digestión, activan los procesos de regeneración y desinflamación del aparato digestivo, revitalizan los mecanismos metabólicos internos. 
• Mejoran el funcionamiento intestinal, alivian el estreñimiento, fortalecen el intestino y la flora intestinal, contribuyen a eliminar gases y desechos. 
• Rebajan el índice de colesterol. 
• Tonifican el sistema nervioso. 
• Contribuyen a mantener la elasticidad de las arterias y la vitalidad del sistema glandular. 
• Retrasan el envejecimiento, sus componentes permiten que las células del cuerpo se mantengan jóvenes durante más tiempo. 
• Favorecen el metabolismo por su acción reconstituyente. 
• Su consumo está recomendado en casos de anemia por su riqueza en clorofila, y para personas con el estómago delicado. 

¿Cómo hacer germinados en casa? 

Necesitas
1 frasco conservero de vidrio de un litro. 
3 cucharadas de legumbres, granos o semillas a elección, que no hayan sido tostadas ni congeladas (lenteja, soya, trigo, amaranto, alfalfa, garbanzo, etc.) 
1/2 litro de agua. 
Destinar un espacio cálido y oscuro para la germinación. 

Preparación
  1. Lavar las legumbres, granos o semillas y ponerlas a remojar en un frasco con el ½ litro de agua. Cubrir el frasco con una gasa o tela delgada. 
  2. Dejar el frasco en un lugar oscuro y cálido, de 9 a 12 hrs. la alfalfa y el fenogreco y de 12 a 15hrs. las lentejas, garbanzos, soja, etc. 
  3. Pasado el tiempo, escurrir el agua y enjuagar bien con agua tibia. 
  4. En el mismo espacio donde se dejó reposar las legumbres, granos o semillas, posicionar el frasco de forma horizontal (inclinado) acomodando los granos a lo largo del frasco, enjuagando 2 a 3 veces los primeros 3 días y luego una vez al día. Mantener las semillas húmedas y bien oxigenadas, de lo contrario, podría crear hongos el exceso de agua y moho la falta de aire. 
  5. Al 4to-5to día ya se pueden ver los primero brotes. Cuando los brotes tienen de 2 a 3 centímetros de largo, exponer a la luz solar indirecta por espacio de unas 2 horas para que las hojitas se pongan de color verde (proceso de la clorofila). Esto favorecerá el aumento de vitamina C y que tome un sabor más agradable. 
  6. Terminado el proceso de germinación, puedes conservar los brotes refrigerados, bien escurridos y secos. Pueden durar sin problemas alrededor de una semana, se recomienda hacer cantidades frecuentes de germinados. 
  7. Si se desea, se pueden eliminar las cáscaras (hollejo) de la legumbre antes de comerlo, para eso, colocar dentro de una cubeta con agua y la cáscara flotará. Retirar con un colador. 


Consejos a considerar para hacer brotes y germinados en casa 
El tiempo de germinación varía según la temperatura. En climas más calientes y húmedos se debe acortar el tiempo de remojo y enjuagarlos con más frecuencia para mantenerlos frescos. La temperatura aprox. es de 20º grados. 
Evitar colocar simultáneamente más de una clase de semillas, granos o legumbres en un mismo frasco, pueden germinar a distintos tiempos, lo que entorpece los procesos. 
Usa envases medianos y/o grandes. Las semillas aumentan de tamaño y necesitan estar “libres”, con espacio (Frasco 3 veces el tamaño de las semillas, legumbres y/o granos). 
Puede usar un envase al comienzo y cambiarlo en el proceso. 
Prefiere semillas, granos y legumbres orgánicas. (Puedes encontrarlas en tostadurías, ferias libres, etc.) 
Existe la posibilidad de que queden semillas, legumbres y granos sin germinar. Revísalos antes de prepararlos y retíralos. 
Los brotes de ajonjolí (sésamo) se amargan si están en germinación más de dos días, se aconseja consumirlos a más tardar 48 horas después de haber iniciado el remojo. 

Beneficios del consumo de Kéfir


El Kéfir también llamado yogur búlgaro, yoca, yogur de pajaritos, leche kefirada o bulgaros, es una leche fermentada rica en bacterias y levaduras probióticas que mejoran la flora intestinal, auxilian en la inmunidad y mejoran el tránsito intestinal, ayudando a mantener la salud general del organismo. 

Las bacterias del Kéfir pueden ser cultivadas en casa con seguridad, y la producción de la bebida es fácil y se asemeja a la producción del yogur natural. Se conocen dos tipos de kéfir de leche y de agua. En realidad, el kéfir de agua y el de leche contienen las mismas bacterias y levaduras, pero adaptados a medios distintos, se dan además distinciones en cuanto a las enzimas presentes en unos y otros. 

Por ser un alimento probiótico, los principales beneficios del Kéfir son
  • Disminuir el estreñimiento, ya que las bacterias buenas mejoran la digestión y aceleran el tránsito intestinal; 
  • Combatir la inflamación intestinal, porque tener la flora sana es el principal factor para evitar enfermedades; 
  • Facilitar en la digestión; 
  • Bajar de peso, porque es rico en proteínas y es baja en calorías; 
  • Combatir la osteoporosis, por ser rico en calcio; 
  • Prevenir y combatir la gastritis, especialmente la gastritis causada por la bacteria H. pylori; 
  • Fortalecer el sistema inmunológico, porque mantiene la flora intestinal sana, que impide la infección por microorganismos a través del intestino. 

Además de esto, el kéfir equilibra la flora intestinal y mejora la absorción de nutrientes, siendo excelente para quien se somete a tratamientos con antibióticos y precisa regular el tránsito intestinal. 

Beneficios del Probióticos. Kéfir y cómo prepararlo 
El kéfir es un alimento bajo en calorías ya que 100 g tienen sólo 37 calorías, siendo una buena opción para usar en las dietas para adelgazar. Se puede utilizar para sustituir la leche o el yogur, siendo una excelente opción para quien sufre de estreñimiento. 
Puede consumirla 1 vez al día, en el desayuno o en una merienda, por ejemplo. Para que el sabor quede más agradable puede endulzarlo con un poco de miel o añadir frutas como banana o fresa, en forma de batido. 
El kéfir ayuda a aflojar el estómago, por lo se evacua con más regularidad y es posible notar que la barriga queda menos hinchada en la primera semana, pero para que la pérdida de peso sea duradera se debe seguir una dieta para bajar de peso y practicar ejercicios regularmente. 

Los granos de kéfir tuvieron origen en el caucásico, siendo una bebida muy antigua, y están constituidos por diferentes microorganismos que son buenos para regular el intestino. 

Cómo hacer kéfir de leche 
Granos de Kéfir de leche
La preparación del kéfir es muy simple siendo semejante a la producción casera de yogur natural: 
Ingredientes 
100 g de kéfir; 
1 litro de leche de vaca o de cabra. 

Modo de preparación 
 Colocar en un recipiente de vidrio los granos de kéfir, la leche fresca, pasteurizada o no, descremada, semi-descremada o completa. 
El contenido se deja a temperatura ambiente durante aproximadamente 24 horas. La leche fermentada es colada para separar y recuperar los granos que se agregan a más leche fresca, repitiendo el proceso.  
El kéfir líquido ya fermentado puede ser consumido inmediatamente o puede ser mantenido en la nevera para consumo posterior. 

Cómo hacer kéfir de agua 
Granos de Kéfir de agua
La diferencia del kéfir de agua con respecto al de leche es que no necesita lactosa para que se produzca la fermentación, siendo esta realizada a través de la adición de azúcar o azúcar morena, por lo que pueden beneficiarse de todas sus propiedades aquellas personas que son vegetarianas. 
Ingredientes 
 100 g de kéfir; 
60g de Azúcar mascabada o morena; 
1 litro de agua. 

Modo de preparación 
Colocar el agua en un recipiente de vidrio, si lo desea para darle un mejor sabor puede exprimir medio limón y añadir los granos de kéfir y el azúcar. 
A continuación debe tapar el frasco con un paño y una banda elástica y agitarlo, manteniéndolo a temperatura ambiente durante 2 a 3 días.
Luego debe ser colado y se puede beber a continuación o se puede guardar en la nevera. 

Saborizar el kéfir de agua 
 Después de la fermentación el kéfir de agua puede mezclarse con jugos de frutas, tés, jengibre y frutas secas para darle sabor. La fermentación hace con que la bebida quede ligeramente gasificada, siendo posible darle sabor al gusto para crear un "refresco casero". 
 El kéfir de agua dura de 3 días a 1 semana en el frigorífico, pudiendo ser consumido en las meriendas o como acompañante del almuerzo o de la cena. 

Cómo cultivar y cuidar del Kéfir 
Para mantener el kéfir siempre saludable y productivo se debe almacenar en un recipiente con leche o agua con azúcar después de cada fermentación, recordando que no deben utilizarse materiales de metal y se debe tapar bien el recipiente con una gasa o un papel de cocina para que no entre en contacto con moscas u hormigas. En los días mas calientes o para retrasar el proceso de fermentación se puede almacenar el kéfir en el frigorífico, pero si desea pasar más días sin usar el kéfir para fermentación, los granos deben ser guardados en un recipiente con tapa y congelado. 

Poco a poco el kéfir va creciendo con las fermentaciones y crea una especie de goma o líquido más espeso, siendo necesario lavar los granos en agua por lo menos una vez por semana. Es posible guardar parte de los granos en el congelador para tener siempre una reserva y lo que sobre puede ser donado para que otras personas produzcan su kéfir en casa, recordando que los granos del kéfir de leche deben ser separados de los granos de kéfir de agua. 

Contraindicaciones y efectos secundarios 
A pesar de no haber contraindicación formal, la fermentación del kéfir produce una pequeña producción de alcohol y por eso puede ser perjudicial para personas que tengan enfermedades del hígado. Además de esto, también está contraindicado en caso de enfermedades intestinales graves, en casos de intolerancia a la lactosa y alergia a la leche, pudiéndose utilizar como alternativa el kéfir de agua, que se hace a partir de agua o agua de coco con azúcar mascabado o moreno en lugar de la leche. 
 La ingestión excesiva de kéfir también puede causar problemas como dolores abdominales y diarrea.

Beneficios del consumo de Kombucha

La Kombucha es una bebida probiótica hecha a partir del té negro endulzado que es fermentado por levaduras y bacterias que hacen bien para la salud, siendo una bebida que fortalece el sistema inmune y mejora el funcionamiento intestinal. Su método de preparación es muy parecido al yogur casero y al del kéfir, pero se usa té negro en vez de leche como ingrediente principal. 

El té negro con azúcar blanco son los ingredientes más utilizados para hacer kombucha, pero también se pueden utilizar otras hierbas e ingredientes adicionales como té verde, flor de jamaica, té de hierba mate, jugo de frutas y jengibre, para que tenga un sabor más agradable al paladar. 

Beneficios de la Kombucha para la salud y cómo prepararlo 
Beneficios de la Kombucha La Kombucha tiene su origen en China y tiene un sabor parecido a una sidra espumante de manzana, y su consumo trae los siguientes beneficios para la salud: 

  • Contribuye para adelgazar porque regula el apetito; 
  • Combate la gastritis, porque ayuda a eliminar la bacteria H. pylori, una de las grandes causantes de la gastritis; 
  • Previene infecciones intestinales, por combatir otras bacterias y hongos que causan enfermedades en el intestino; 
  • Actúa como desintoxicante, por unirse a las moléculas tóxicas del organismo y estimular su eliminación a través de la orina y por las heces; 
  • Alivia y previene problemas como gota, reumatismo, artritis y cálculos renales, por desintoxicar el organismo; 
  • Mejora el funcionamiento el intestino, por equilibrar la flora intestinal y tener acción laxante; 
  • Equilibra el pH sanguíneo que deja al organismo naturalmente más fuerte para prevenir y curar enfermedades; 
  • Reduce el estrés y combate el insomnio, siendo una buena opción para períodos de mayor estrés o pruebas del colegio o universidad; 
  • Reduce el dolor de cabeza y la tendencia de sufrir de migraña; 
  • Mejora el funcionamiento del hígado, siendo una buena opción para después de tomar antibióticos; 
  • Fortalece el sistema inmunológico, por ser rico en antioxidantes y actuar en el intestino; 
  • Previene enfermedades como diabetes y cáncer porque mejora el funcionamiento de todo el organismo en general; 
  • Normaliza la presión arterial; 
  • Disminuye los síntomas de la menopausia; 
  • Previene infecciones urinarias porque es una buena fuente de líquidos, lo que hará con que se produzca más orina. 


Los beneficios de la Kombucha son mayores que tomar el té negro o verde en su forma tradicional, y por esto esta bebida es utilizada como un poderoso beneficio para la salud. 


Cómo hacer Kombucha en casa
Hongo de Kombucha
Para preparar la base del kombucha, también llamada de primera fermentación, se deben llevar a cabo los siguientes pasos: 

Ingredientes para la Primera Fermentación: 
 3 L de agua mineral; 
Olla de acero inoxidable, vidrio o cerámica; 
210 grs de azúcar blanco; 
5 sobres ó 3 cucharadas soperas de té negro; 
1 hongo de kombucha; 
1 recipiente de vidrio hervido con agua caliente; 
300 ml de kombucha listo, equivalente a 10% del volumen total de la kombucha a ser producida (opcional) 

Modo de preparación
Lavarse bien las manos y los utensilios, pasándolos por agua caliente y vinagre para ayudar a eliminar cualquier contaminación por microorganismos. Colocar el agua en la olla y calentar. Cuando el agua esté hirviendo, se debe adicionar el azúcar y mezclar bien. En seguida, se debe apagar el fuego y agregar los sobres de té, dejando que la mezcla descanse de 10 a 15 minutos. 

Colocar el té en el frasco de vidrio y esperar a que se enfríe hasta alcanzar la temperatura ambiente. En seguida se debe adicionar el hongo de kombucha y los 300 ml de kombucha listo (si se desea), tapando el frasco de vidrio con un paño y una liga, lo que irá a permitir la circulación del aire sin dejar la mezcla expuesta. Guardar el frasco en un sitio aireado, sin mucha luz alrededor de 6 a 10 días, tiempo en el cual la bebida final estará lista, con el aroma de vinagre y sin sabor dulce. Al final del proceso, una nueva colonia de kombucha es formada por encima de la primera, el cual puede ser guardada en el refrigerador o donada para otra persona. 

Cómo hacer Kombucha de segunda fermentación
Se le puede dar sabor con ingredientes como jengibre, pera, uva, fresa, limón, piña, naranja y otras frutas, trayendo un nuevo sabor para la bebida y agregando el beneficio de las frutas. Las frutas y otros ingredientes deben ser agregados en la Kombucha base ya lista, y en esta fermentación la bebida quedará gasificada, recordando un refresco. 

Kombucha de Limón y Jengibre 
Ingredientes: 1,5 litro de kombucha; 
3-5 ruedas de jengibre; 
Medio limón exprimido; 
Botella de plástico 1,5L de capacidad 

Modo de preparación: 
 Colocas las ruedas de jengibre y el jugo de limón en una botella de plástico limpia. Agregue la Kombucha en la botella, llenándola hasta quedar totalmente completa, para que no quede aire en la botella. Tapar y dejar reposar de 3 a 7 días, tiempo necesario para que haya una nueva fermentación, generalmente está lista al cabo de 5 días de fermentación. Sin embargo, como la bebida crea gas rápidamente, algunas personas les gusta el sabor después de 24 horas de la segunda fermentación. 
Para hacer la Kombucha con otros sabores, solo es necesario licuar la fruta, colar y agregarla en la botella en conjunto con la Kombucha base, esperando 5 días mínimo para la nueva fermentación que dará sabor a la bebida. 

El hongo Chino o de Kombucha con los hongos y bacterias responsables por la fermentación de la bebida

Limpieza de colon con semilla de lino

Las semillas de lino son muy eficaces para conseguir limpiar el colon y eliminar deshechos que dañan la salud, estas semillas pueden conseguirlo mediante la combinación con el kéfir, estimulando el intestino para aliviar la carga de tóxicos acumulados. 
Mediante la eliminación de mucosas, depósitos fecales y parásitos en los intestinos se puede prevenir y curar muchas condiciones de salud. 
 En 70 años, nuestros intestinos procesan 100 toneladas de alimentos y 40.000 litros de líquido, lo que lleva a la conclusión de que, cerca de 7 kilos de depósitos fecales y residuos tóxicos se acumulan en el intestino. 
Ellos contaminan nuestra sangre y causan daños irreparables en el cuerpo. 
 Estreñimiento frecuente, metabolismo alterado, diabetes, aumento excesivo o insuficiente de peso, enfermedades renales y hepáticas, problemas de audición y de visión, problemas de la piel, pelo y uñas, así como otras enfermedades, que van desde la artritis hasta cáncer, son sólo algunas de las señales de que tus intestinos no están limpios. 

 Beneficios de la semilla de lino para limpiar el colon 
Los enemas o lavativas pueden limpiar sólo una pequeña parte del colon – 40-50 centímetros-, y el tratamiento con enemas con un equipo especial es caro, consume tiempo y afecta a la microflora intestinal. 
 Consumir 1-3 cucharadas de harina de linaza durante tres semanas puede limpiar completamente los intestinos, desde el moco y depósitos fecales o parásitos, conservando plenamente la microflora intestinal. 
 Este método proporciona la normalización rápida de peso y quema de grasa. 
Tiene un efecto positivo sobre la regulación del metabolismo de los lípidos. 
La harina de linaza puede absorber y eliminar las toxinas del cuerpo y reducir el nivel de colesterol en la sangre. 

 Indicaciones para consumir semilla de lino
Condiciones inflamatorias del tracto respiratorio superior, el tracto gastrointestinal Gastritis, colitis, úlcera de estómago y duodeno Enfermedades del tracto urinario, infecciones, cistitis, pielonefritis Peso corporal excesivo, trastornos del metabolismo de lípidos 

Receta para limpieza del intestino con harina de semillas de lino 
En lugar de desayuno consumir esta mezcla durante 3 semanas: 
 Semana 1: 
1 cucharada de harina de linaza y 100 ml de kéfir 
Semana 2: 
2 cucharadas de harina de linaza y 100 ml de kéfir 
Semana 3: 
3 cucharadas de harina de linaza y 150 ml de kéfir 

Si la harina de linaza no está disponible en tu tienda local, puedes comprar un poco de semilla de lino y molerlas finamente. No es recomendable hacer algo extra para los próximos días, ya que las semillas pueden volverse rancias. 
Cada mañana preparar una nueva porción. 
 Consumir esta mezcla en vez de desayuno. 
Asegúrate de beber al menos 2 litros de agua al día. 
Se obtienen mejores resultados si bebes agua con miel de abejas, siempre busca que sea miel pura. 
 El procedimiento de limpieza se debe practicar una vez al año. 

 Nota. Si te es difícil conseguir o preparar el Kéfir, puedes usar como alternativa el yogur natural sin azúcar, considera que el hecho de que sea casero le da un plus, ya que puedes estar seguro de que cada uno de los ingredientes del yogur es natural.

Jarabe para limpiar pulmones


La fitoterapia en verdad es una alternativa muy buena para tratar problemas del sistema respiratorio y ayudar a sacar las flemas. Es efectiva para como los remedios caseros para la tos, especialmente la tos productiva (tos con flemas) que puede ser derivada de una bronquitis, de una bronquitis crónica (como la EPOC), de enfisema, la fase avanzada de un enfriamiento, de un resfriado, etc. 

Jarabe casero para sacar la flema 
Los remedios naturales siempre han sido utilizados por muchas generaciones para aliviar nuestros padecimientos, muchas recetas hasta hoy en día son utilizadas por su gran efectividad dado que hay plantas realmente poderosas por sus propiedades y caracterísicas para curar ciertos padecimientos como la ayuda para eliminar las flemas. 
 Existe una gran cantidad de plantas medicinales para prevenir o tratar la tos. El tomillo, la raíz de malvavisco, semillas de lino, brotes de abeto o la pulmonaria son algunos ejemplos de las plantas más utilizadas. 

Beneficios de este jarabe 
Este jarabe es muy eficaz para expulsar flemas de los pulmones y es especialmente adecuado para los niños más pequeños. 

 Ingredientes: 
 1 cucharadita de raíz de malvavisco 
1 cucharadita de semillas de lino 
1 cucharadita de salvia 
1 limón (cortado en rebanadas) 
250 ml de agua 
250 gramos de azúcar mascabado 

Preparación: 
 Poner el agua y el azúcar mascabado (panela/raspadura) en el fuego y hervir hasta que se derrita. 
Añadir los ingredientes restantes y bajar el fuego. Retira la mezcla lejos del fuego después de 15 minutos y colarlo. 

Beber una cucharada de este medicamento tres veces al día hasta que calme la tos. 
Mantén el jarabe refrigerado. 

Notas: 
La tos con flemas como síntoma de una enfermedad (infecciosa, crónica) puede indicar una enfermedad subyacente con graves complicaciones. Como por ejemplo la pulmonía, la cual es una enfermedad infecciosa seria. Siempre observa si la tos se vuelve sospechosa, en dado caso siempre hay que visitar un médico en seguida.