El arte de no enfermar

El Bloqueo Psico-corporal

Desde hace tiempo, todo el mundo habla de los bloqueos, concepto abstracto, ambiguo y subjetivo, pero muy empleado. Pero ¿qué es exactamente eso de un “bloqueo” ? 

El Equilibrio es el estado natural del ser humano en el que la energía de la vida o energía vital fluye a través del cuerpo-mente con libertad, y se manifiesta en forma de salud física, estabilidad emocional y paz interior 

Un BLOQUEO es entonces cualquier obstáculo que impida o dificulte ese flujo de la energía vital, y rompe la armonía del cuerpo-mente creando enfermedad e inestabilidad interior. Todo bloqueo es de naturaleza PSICO-CORPORAL, porque afecta tanto al Cuerpo como a la Mente, y comprende 6 aspectos:

Muscular, Respiratorio, Perceptivo, Energético, Emocional y Mental.

El Bloqueo Corporal

Para respirar utilizamos músculos. El Diafragma es el elemento de unión entre la Respiración y el Movimiento. La única manera de respirar y de moverse es mediante los músculos, pero asimismo la única forma de contener la respiración o el movimiento es acortando y bloqueando los músculos. Todo acortamiento muscular bloquea a la vez tanto la respiración como el movimiento. Si inhibo mi impulso de golpear acortando los músculos del brazo, ese acortamiento se transmite a través de las cadenas musculares hasta el diafragma, que inhibe también la respiración. Y viceversa... 

Y si ese acortamiento o contracción muscular no se libera y relaja dentro de un tiempo prudencial, producirá un acortamiento muscular crónico que llamamos Bloqueo Muscular. La tensión acumulada en los tejidos acortados se vuelve crónica, y éstos pierden hasta cierto punto la capacidad de volver a relajarse y estirarse a su longitud normal y natural. Para que un músculo o tejido esté flexible y fuerte necesita un aporte rico y continuo de oxígeno, glucosa y nutrientes. Si un músculo o tejido permanece mucho tiempo en estado de tensión crónica, esa inmovilidad entorpece el metabolismo sano de los tejidos, que al dejar de recibir nutrientes empiezan a endurecerse, fibrosarse y formar adherencias (masas pegadas de tejido conjuntivo fibroso) que restringen aún más el movimiento y por lo tanto la respiración; acordémonos que respiramos con músculos. Toda inhibición muscular-respiratoria provocará tarde o temprano, si no se elimina, un BLOQUEO MUSCULAR Y RESPIRATORIO, que a su vez provoca un BLOQUEO PERCEPTIVO, es decir, un bloqueo en la percepción de esa zona del cuerpo.

Los efectos y consecuencias de ese triple bloqueo corporal (muscular + respiratorio + perceptivo) son que desciende el nivel de energía vital del organismo y altera las funciones y estructuras del cuerpo. Por dentro de los músculos y entre ellos discurren otras estructuras del cuerpo: articulaciones, vasos sanguíneos y linfáticos, nervios y plexos nerviosos, tubos y conductos, glándulas, etc. Esto significa que cualquier bloqueo corporal afecta también a dichas estructuras. Si los músculos y tejidos que rodean una articulación (ligamentos, tendones, fascias) están bloqueados, esa articulación no poseerá su amplitud normal de movimiento y quedará limitada y restringida. Los vasos sanguíneos y linfáticos que discurren a través de un músculo o tejido bloqueado estarán obstruidos y dificultarán la circulación de sus fluidos. Los nervios y plexos que pasan por músculos acortados y rígidos se pinzarán o irritarán, afectando la sensibilidad y provocando dolor en alguna zona. Los tubos y conductos que atraviesan un músculo bloqueado verán su diámetro reducido y obstruirán la propagación de sustancias. Es decir, que los efectos de un bloqueo corporal no sólo se manifiestan a nivel muscular y respiratorio, sino también en los niveles articular - conjuntivo - circulatorio - nervioso - peristáltico - orgánico.

Las causas básicas del triple bloqueo corporal son los hábitos posturales erróneos, las posturas antálgicas ( anti-dolor ), las represiones emocionales, y los traumas, entre otras.


El Bloqueo Emocional 

En situaciones de sufrimiento, para no sentir creamos una coraza emocional con el fin de apartar de la consciencia todo aquello que nos hace sufrir: sensaciones, sentimientos, emociones y estados dolorosos. La estrategia de supervivencia consiste en no sentir para no sufrir; forma parte del instinto de conservación. ¿Pero cómo nos las arreglamos para no sentir? Enterrando la sensación en el inconsciente; en otras palabras, negándolo y olvidándolo. Nos anestesiamos. De esta manera el inconsciente es el armario de los trapos sucios de nuestra consciencia, porque como en un sótano, en él escondemos y enterramos todo lo que hemos rechazado, reprimido, negado, ignorado, odiado, no superado y no resuelto de nuestra vida. Cada vez que algo nos hace sufrir, lo tapamos y escondemos no sintiéndolo, erigiendo una barrera entre la sensación u emoción y nuestra consciencia por medio de la negación y el olvido, y así lo enterramos bien profundo en el sótano del inconsciente.

La ansiedad es la sensación que experimentamos cuando una situación promete placer pero a la vez amenaza dolor; por ejemplo, un niño que quiere estar con su madre, pero ésta lo rechaza. Esto crea un asfixiante y paralizante estado de “deseo esto (el cariño de mamá), pero lo temo (su rechazo y abandono)”.. Esta coraza o defensa es “no voy a sentir el deseo para no sentir el resto”. Inconscientemente se dice : “A partir de ahora, cada vez que en la vida se me presente esta situación la negaré, la evitaré, no la veré ni la sentiré, para evitarme así el dolor y sufrimiento que conlleva”. Muchos adultos no consiguen tener relaciones afectivas estables o duraderas porque rompen la relación cuando empiezan a profundizar en ella, lo que refleja un miedo inconsciente al abandono que proviene de la infancia.

Esa falsa defensa o coraza emocional constituye un BLOQUEO EMOCIONAL, que tiene la finalidad de volver inconscientes los estados del ser dolorosos, intensos o abrumadores que nos desbordan o no podemos gestionar. Las necesidades básicas no cubiertas de la infancia, sumado a todos los traumas u conflictos no resueltos, se arrastran ocultas en el inconsciente, enterradas y olvidadas (pero presentes) hasta la vida adulta, ocasionando un desarrollo desarmónico de la personalidad y la formación de una estructura de “carácter” adaptado para sobrevivir con ellos. 

El Bloqueo Emocional se consigue mediante el Bloqueo Corporal 

Una e-moción es un movimiento de energía vital-emocional hacia fuera al mundo, un movimiento que conlleva una actividad corporal (Movimiento), y que produce unas sensaciones físicas (Percepción) que hacemos fluir y circular por medio de la Respiración. Si queremos frenar o impedir ese movimiento de energía hacia fuera, necesariamente hemos de contener el movimiento corporal y cortar las sensaciones que lo acompañan inhibiendo la respiración. Y esto sólo lo podemos hacer mediante el triple bloqueo corporal: manteniendo los músculos acortados (no expresar) y conteniendo la respiración (no sentir). Por ejemplo, una niña que quiera reprimir su tristeza tendrá que contraer los músculos del abdomen, pecho y garganta, así como contener la respiración, para no llorar. Moraleja: como seres físico-instintivos, el bloqueo corporal es la mejor táctica para no sentir; de lo que se deduce que el bloqueo corporal produce el bloqueo emocional. Es más, la tensión muscular es la manifestación física del bloqueo emocional o conflicto interior. Todo conflicto y bloqueo emocional tiene su reflejo a nivel físico en forma de tensiones musculares crónicas. Los conflictos emocionales no resueltos (traumas) se estructuran en el cuerpo en forma de tensiones musculares crónicas que restringen la respiración, el movimiento y la percepción, por lo que cada bloqueo corporal es la manifestación física y visible de un bloqueo emocional. 

El Bloqueo Energético

Este doble bloqueo corporal + emocional provoca a su vez un BLOQUEO ENERGÉTICO, porque la tensión muscular crónica y la obstaculización de las emociones en una parte del cuerpo obstruye y bloquea el libre fluir de la energía vital a través de esa parte. El bloqueo energético crea en el cuerpo físico-etérico unas condiciones de desequilibrio energético que pueden manifestarse de cuatro maneras: sobreestimulación, debilidad, congestión o falta de integración energéticas.

Ahora ya sabemos qué define el abstracto concepto de “bloqueo”, y qué es un Bloqueo Psico-corporal.


Aspectos del Bloqueo Psico-corporal

Un bloqueo psico-corporal ( BPC ) contiene 5 aspectos al mismo tiempo : Respiración – Movimiento – Percepción – Expresión - Energía Vital. Si queremos disolver un BPC hemos de trabajar en los cinco niveles al mismo tiempo. Esta es la razón por la que las terapias sólo corporales o sólo analíticas no producen grandes progresos.

Cualquier BPC en una parte del cuerpo provoca simultáneamente un bloqueo corporal (limitación, restricción, acortamiento y rigidez de la respiración, el movimiento y la percepción), un bloqueo energético (debilitamiento, sobreestimulación o congestión de la energía vital) y un bloqueo psicológico (represión emocional y confusión mental). Por ejemplo, un BPC en el segmento del abdomen separa el tórax de la pelvis, el corazón de los genitales, el centro cardíaco del centro sacro y el nivel afectivo del nivel sexual, lo que provoca: 

- Nivel Respiratorio : limitación y restricción de la respiración abdominal.

- Nivel Muscular: acortamiento y rigidez de los músculos del abdomen, restricción articular y limitación de los movimientos del tronco inferior y columna lumbar.

- Nivel Perceptivo: insensibilización la consciencia corporal del abdomen y la pelvis. 

- Nivel Emocional: represión de los sentimientos y emociones, especialmente sexuales, y confusión mental respecto a ellos. 

- Nivel Energético: obstrucción de la energía vital en el abdomen que lleva a sobreestimulación, debilidad o congestión energética sus órganos. 

La Coraza Caractero-Muscular o “Armadura” 

Y todo el conjunto de bloqueos psico-corporales que una persona ha ido acumulando en el cuerpo-mente a lo largo de toda su evolución como individuo crea con el tiempo una serie de actitudes caractero-musculares o patrones fijos de conducta y comportamiento que son patrones defensivos estructurados en el cuerpo y en la mente. Ahí nace la llamada “Coraza”. La mayoría de personas ha estructurado su patrones de conducta defensiva en 5 grandes tipos de actitudes-patrón, que se suelen conocer como”Estructuras de Carácter”, las corazas esquizoide, oral, psicopática, masoquista y rígida. En cada tipo de coraza caractero-muscular podemos descifrar el pasado emocional de la persona, la memoria de sus experiencias. 

Cómo reconocer un BPC en el cuerpo 

Los parámetros físicos que indican y revelan un bloqueo psico-corporal en el cuerpo son :

Tensión muscular, rigidez o endurecimiento de los tejidos blandos (piel, tejido conjuntivo y musculatura). 

Hipersensibilidad, cosquillas o dolor. 

Restricción o inmovilidad articular. 

Falta de movimiento respiratorio. 

Dolor al hacer un masaje de tipo conjuntivo. 

Sequedad cutánea (deshidratación, falta de nutrientes) 

Insensibilidad y falta de consciencia corporal. 

Exceso o falta de temperatura corporal (hiper o hipotermia). 

Piel pálida (hipovascularización). 

Reacciones cutáneas o vasculares a cualquier técnica de desbloqueo (rojez, erupciones, rotura de capilares, hematomas) . 

Pliegues del tronco (cortes). 

Cierre de la persona al contacto corporal. 

El Desbloqueo Psico-Corporal es una método terapéutico integrador que tiene la finalidad de disolver los bloqueos psico-corporales del cuerpo-mente mediante un abordaje global de desbloqueo corporal, armonización energética y liberación emocional, todo ello con el objetivo de devolver el equilibrio y la armonía a la persona en todos sus aspectos. 

A través del DESBLOQUEO PSICO-CORPORAL y sus técnicas, las emociones congeladas del pasado atrapadas y registradas en la MEMORIA CELULAR de los diferentes tejidos (conectivos, orgánicos y miofasciales) de la estructura corporal se liberan y sanan, permitiendo disolver el dolor interno y sanar el niño herido, lo que conduce a la Curación, Maduración y Plenitud de la persona. 

FUENTE Centro de Estudios Humanos Hidra